12 septiembre 2014

la escritura lleva siglos delineando imágenes sociales

En la era axial de nuestra Historia, dicen los antropólogos que pasamos al Neolítico, gracias a la contabilidad, la escritura y las primeras ciudades. Cientos de siglos de culturas orales preceden a la Historia que, con la comunicación escrita fija eventos y significados. A partir de la escritura neolítica la comunicación antigua se despliega como ciencia en la dialéctica, como técnica en la retórica, y, como arte -en fin- en la poética. Destacó primero la relación entre lo escrito y lo verdadero, que centra el pensamiento dialéctico, quizá como explicación de la eficacia social que alcanza la comunicación, como razón de la potencia de la escritura para divulgar imágenes.

En el cuarto milenio antes de nuestro tiempo, el paso de las culturas de la palabra a las civilizaciones escritas constriñe las variedad de contextos y de significados de los ritos y de las narraciones orales anteriores. Los escritos remiten a una significación más cerrada, intencional, lineal. Siglos adelante, cualquier tipo de texto visual, escrito o sonoro (con sus tecnologías de registro y delimitación de los textos) remite a horizontes autorizados de interpretación y reproducción, se teje en un tiempo determinado y duradero, y alcanza un rango de recepción pública, de imagen social.

la caverna de Platón: dialéctica y retorica 
Desde variadas arquitecturas de significación los discursos tejen horizontes de interpretación autoriales o escolares, y -en definitiva- vínculos entre lo verbal y unas determinadas formas de representación. A través de estos parámetros y estructuras discurre la recepción de un público atento a las instituciones del poder de cada tiempo. Bajo uno de los significados de imagen, en comunicación se entiende el alcance social de los discursos institucionales, la expresión social de cómo hemos leído y digerido los grandes relatos nacionales, religiosos... a lo largo de la historia.

Han evolucionado sucesivas tecnologías de la escritura, desde la industria editorial, con los medios de comunicación y entretenimiento, hasta las redes sociales en el comienzo de este siglo. Parece obligado revisar aquellas dialéctica, retórica y poética neolíticas. En la Edad Media, el Trivium ya sustituyó la poética por la gramática. Con las ciencias modernas de la naturaleza y del espíritu, con  la separación de la inteligencia explicativa y la comprensiva, la comunicación volvió a su dilema entre ser ciencia y ser técnica, o ser fundamentalmente arte. Desde la crisis posmoderna y la digitalización han tomado un nuevo caríz el fundamento dialéctico del discurso, las formas retóricas de la conversación contemporánea y el alcance de la poética en construcciones socio-técnicas.

Volver a un habla hipertextualizada después de las industrias lineales permite trenzar discursos en formas horizontales, más abiertas a reconocimientos, interpolaciones. Vamos, más parecidas al habla. En estas primeras décadas de internet, en WWW relucen herederos de dialécticas anteriores, gracias a un buscador dominante, plataformas sociales globales junto a otros servicios populares que frenan la independencia de la red dejando entrever viejas dialécticas institucionales como ha ocurrido a lo largo de la Historia del poder conservada y grabada. 

Una mirada más ecológica, cultural y evolutiva debe corregir los escalones culturales y las separaciones disciplinares que atenazan al conocimiento institucionalizado y las ordenadas y regladas academias universitarias contemporáneas

No hay comentarios: