18 diciembre 2013

viene bien evaluar la marcha del curso, pero que sea motivante

Este semestre comencé con trabajos en perfiles personales con estudiantes de 2º de comunicación. Pensarse como proyecto y perderse entre redes sociales y aplicaciones móviles fue todo uno durante las primeras semanas. En eso muy parecido al curso pasado.
Tuve problemas para evaluar los progresos y para el próximo año intentaré apoyarlo en evidencias obtenidas, por ejemplo, a través de formularios.

Una buena lección de comunicación local en redes sociales aprendieron los grupos que escogieron causas o temas que les apasionaran (proyectos) . A pesar del corto tiempo y de la cantidad de presentaciones, la evaluación abierta por pares funcionó aceptablemente dejando claro por dónde se mueve la comunicación de reputación.

No han sido capaces de tomar decisiones sobre casos reales y la mayoría se ha escondido tras frases hechas y lecciones aprendidas. Quieren que siga como final del curso. La evaluación de los argumentos y propuestas deja al menos un aceptable aprendizaje teórico. Hay que buscar otro formato para "forzar" a una toma razonada de decisiones. Les gustó llevar material y equipo para encontrar la mejor solución de los casos con los que se evaluaba su maduración en la dirección de comunicación.



Las universidades casi obligan a que sigamos una evaluación continua. Será "para que los vagos de los profesores, por lo menos corrijan". Pero no nos dejemos engañar consumiendo mucho tiempo en el control. Lo recordaba no hace mucho Juan Freire al analizar las ventajas del sistema educativo finlandes.  Si a alguien interesan mis sugerencias:
Que sean pruebas estimulantes, con una recompensa relacionada con su currículo, pero que les aporte algo como reto.
Que las hagan más estudiantes porque no se ve como freno, obstáculo difícil de salvar. 
Que constituyan una buena lección, con las pistas para continuar el aprendizaje que completamos cuando el tiempo cierra cada periodo. 

12 diciembre 2013

miradas al diseño

Cada imagen se construye según códigos y culturas que enfocan lo que podemos / debemos ver.
Desde "la superficie hacia el interior" nos podemos fijar en los detalles, los significados, o, en las alusiones y ciertos mensajes que las imágenes comunican.

Puedes ver la presentación que sigue intentando separar tres tipos de código: la composición retórica, el valor estético y el sentido cultural.

Diferenciando las imágenes por el momento que ocupan al comunicarlas

Mira las imágenes recogidas en la presentación según unas fases como concebir ideas, componer y distribuir elementos, en el estadio de su comunicación por partes o seriada, o, en la conexión final de todos sus fragmentos y componentes como un texto unitario. Tras botar el suelo en el gráfico, encaja las piezas del texto como formando una misma imagen.

Para comparar el atractivo estético o su poder semántico

Desde un punto de vista más estético, mirando lo que comunican las imágenes, podemos pesar su valor, medir el protagonismo que tienen dentro de una conversación. Unas son atractivas y adecuadas al lanzamiento, otras son menos explosivas pero valen para explicar, completan. O son simplemente oportunas cuando conversamos sobre nuestros intereses. La imagen recibida aterriza cuando recogemos y completamos la historia que nos cuenta.

Como balance social de un tiempo
Podemos ver la secuencia partiendo de imágenes obtenidas de contextos conocidos, componiendo metáforas visuales no habituales, hasta construir imaginarios que antes no existían. Y que con las imágenes comparten organizaciones o nuevas formas y movimientos sociales.




Dudo que esta presentación merezca ser vista tres veces, pero intenta ayudar a quienes nos peleamos con metodologías para investigar imágenes.

Hay un plano, más "externo"en una imagen en el que destacan formas y relaciones entre fragmentos en un texto (hipertexto/hipermedia). El plano recoge tanto los "limites internos" de la imagen (morfológicos y sintácticos), como el co-texto de lo escrito o contado alrededor de ellas (iconografía): sus bocetos, su realización, los comentarios... Los textos de los productores cuentan hoy otros textos de los espectadores, como ocurre con los comentarios en redes sociales de relatos en otros medios en los que se comentan componentes y formas de los textos.

En un plano más inmaterial, "más interno" si seguimos con la broma, la imagen transmite emociones, y en ocasiones también, ideas o mensajes. El territorio de las significaciones (semántica) y de lo que se quiere que hagamos al ver unas imágenes (pragmática) constituye un mundo propio de narraciones de las que se ocupa la iconología. Contamos con una iconología virtual, con las interpretaciones de los relatos icónicos en la voz de sus espectadores en las etiquetas de las redes sociales y en las comunidades alrededor de emisiones culturales.

El sentido colectivo o social sobre unas imágenes depende de códigos culturales. Pueden ser simple confirmación de los contextos e instituciones de las que vienen. O , en cambio, pueden ser ensayo, disrupción, prototipo y quedan en entornos más alternativos. Aquellas que llegan a ser compartidas y tienen el poder de modificar el  imaginario social anterior constituirían una iconopoiética que está aún por definir. Y de la que yo al menos no tengo ni idea.

Exposición de planteamientos para este protocolo metodológico (también en lenguaje académico)

 Otra entrada que detalla algunas relaciones y tiempos entre comunicación y diseño en medios y en redes sociales