22 marzo 2011

Lo que aprenden probando

Dejar hacer es una forma de enseñar, sobre todo con alumnos que en algunos aspectos ya cuentan con información y encima tienen ganas. El aprendizaje informal puede ser además un motor de innovación. 
Vienen al pelo las siempre acertadas palabras de Dolors Reig
Tal y como se desprende del título, nuevas investigaciones demuestran que la enseñanza precoz puede ser contraproducente. Actualmente no dejamos que los niños más pequeños exploren, investiguen, jueguen y descubran. En su lugar, les ofrecemos instrucción directa, lo que ayuda a que aprendan hechos y habilidades específicas, pero ¿qué pasa con la curiosidad y la creatividad, habilidades aún más importantes para el aprendizaje a largo plazo?
Mientras que la enseñanza de un maestro puede ayudar a los niños a que encuentren una respuesta específica más rápidamente, también hace menos probable que descubran información nueva acerca de un problema, que aprendan a crear una solución nueva e inesperada. Lo veíamos en un antiguo artículo sobre ensayo error y flexibilidad, en el que un grupo de preescolares tuvieron un mejor desempeño en una prueba que requería la puesta en marcha de habilidades complejas que los graduados en una escuela de negocios.

No hay comentarios: